Hasta Núñez dijo que si "había que ficharlo, se fichaba", Johan era un enamorado del caracter y la lucha de Hristo. Vamos, lo mismo que ocurrió con otros jugadores que su día también fueron "verdugos" del Barcelona, con sus antiguos clubs, como Esteban, Urbano, etcétera El interés azulgrana por el "crack" búlgaro surgió precisamente a raíz de una eliminatoria, en la que Stoichkóv brilló con luz propia. En el partido de ida, jugado en el Camp Nou y que concluyó con victoria azulgrana por 4-2, rubricó los dos goles de su equipo: el primero fue de bellísima ejecución, ya que batiría a Zubizarreta con una espectacular vaselina y el segundo lo consiguió al transformarun penalty. Después, en la vuelta, volvería a firmar el único gol que logró el Sredets (se llamaba asi por una sanción de la Federación Bulgara, pero al año siguiente volvería a ser el CSKA de Sofia) en aquel partido, pero no sería suficiente para impedir el nuevó triunfo de los azúlgrana (1-2), que se clasificarían para la "triomfant" final de Berna, que se ganaría a la Sampdoria por 2-0 Stoichkov se enfrentaría pósteriormente dos veces más con el que iba a ser su futuro club y, curiosamente, en ambas ocasiones también "mojaba". En un torneo "Ciutat de Palma", celebrado en el mes de agosto de 1989, batió a Juan Carlos Unzué desde el punto de penalty antes de ser expulsado por acumulación de dos tarjetas amarillas y en el homenaje a Migueli, vistiendo la camiseta de su selección (Bulgaría), sorprendió a Zubizarreta al culminar una brillanteacción personal. Como anecdota, Stoichkov a su llegada firmo un autografo y fue a "Laudrup" o sea a un niño que llevaba la camiseta con el dorsal 9 y con el nombre de Laudrup, jugador al que parecia que le iba a quitar el puesto. Claro que luego los darian grandes tardes de futbol jugando juntos
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