El 3 de julio de 2017, los socios del FC Barcelona protestabann después de que TV3 emitiera un reportaje en el que afirmaba que el club vendía entradas de asientos liberados de socios a precios hasta diez veces por encima del precio de las entradas en partidos de máxima categoría en el Camp Nou, de los cuales el club se quedaba la totalidad del importe (deducida la parte que corresponde al socio del precio normal). El club reconocía que los socios deberían haber sido informados de la operación, que, por otra parte, considera absolutamente legal. De otro de los "negocios" de la Junta de Bartomeu, que ensuciaron a la entidad, eso si el club expulsaria a los socios que se beneficiaron de unas "ventas" de carnes que el club consideraba ilegales. De toda la vida, los socios han prestado el carnet de socio a amigos, familiares o porque no sacar un beneficio. Pero si lo hace el club es legal, en ninguno de los casos seria defendible
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