Considerado un sportmen de la época, practicó varios deportes y destacó
en ciclismo, rugby, natación, atletismo y, sobre todo, fútbol. Antes de
llegar a Barcelona a finales del siglo XIX, pasó por Zúrich, Basilea y
Lyon. Debutó en Zúrich como ciclista a 12 años; practicó también el
rugby, el atletismo y, sobre todo, el fútbol, con el FC Excelsior, del
que se separó y fundó el FC Zúrich. Comerciante de oficio, en 1899 pasó
a residir en Barcelona.
Con un grupo de amigos empezó a practicar el fútbol en el barrio de Sant Gervasi y tuvo la idea de crear un club, al estilo de los que ya había en Francia y en Suiza. Efectuó una llamada por medio de una gacetilla publicada en Los Deportes y el 29 de noviembre de 1899 se constituyó el Foot-ball Club Barcelona en una reunión celebrada en el local del Gimnasio Solé. No quiso ser el primer presidente, se centró a jugar, y fue el jugador más destacado del fútbol catalán de los primeros años, actuando de delantero centro. Entre 1899 y 1903, año que se retiró, marcó 118 goles en 48 partidos. Después continuó siendo el alma del club, del que fue presidente en cinco etapas, la primera a partir del 2 de diciembre de 1908, cuando la entidad estaba a punto de desaparecer a causa de una gran crisis. Relanzó el club e inauguró el campo de la calle de la Industria. Fue presidente hasta el 14 de octubre de 1909. Su segunda etapa abarcó desde el 17 de noviembre de 1910 hasta el 30 de junio de 1913. Aquí luchó contra el profesionalismo que estaba creciendo y determinó que el club se retirara de la federación catalana durante un periodo. En el tercer mandato, del 17 de junio de 1917 al 19 de junio de 1919, ingresaron en el club dos figuras míticas como fueron Samitier y Zamora. En el cuarto, del 17 de julio de 1921 al 29 de junio de 1923, inauguró el campo de las Cortes, consolidó la economía e iniciar la llamada edad de oro con grandes éxitos deportivos. En este periodo, Gamper fue objeto de un partido de homenaje celebrado en el campo de las Cortes el 25 de febrero de 1923, que enfrentó al Barça y una selección catalana. La última etapa, el 1 de junio de 1924 al 17 de diciembre de 1925, fue marcada por la celebración de las bodas de plata del club y por la clausura del campo de las Cortes por Milans del Bosch durante la Dictadura de Primo de Rivera, después de que el público pitara el himno español, en un homenaje al Orfeó Catalán. Gamper tuvo que dejar la presidencia y fue conminado a exiliarse acusado de fomentar el catalanismo.
En total ocupó nueve años la presidencia y bajo su mandato el Barça se proclamó cuatro veces campeón de la Copa de España, seis del Campeonato de Catalunya y tres de la Copa Pirineos. En la etapa de jugador ganó una Copa Macaya (1902) y una Copa Barcelona (1903). También disputó la final del primer Campeonato de España (1902) que el Barça perdió con el CF Vizcaya. Influyó decisivamente sobre la creación de la Federación Española de Fútbol (1909). Tras exiliarse en Suiza, pudo volver a Barcelona con la condición de no tener ningún vínculo con el club.
En su recuerdo hay un busto en el palco presidencial del Camp Nou. En diciembre de 1933 el Ayuntamiento de Barcelona le dedicó una calle y en 1966 el club instauró un torneo veraniego llamado Trofeo Joan Gamper. Igualmente, el 1 de junio de 2006 el club inauguró oficialmente la nueva ciudad deportiva que lleva su nombre. Se han publicado algunas biografías como Joan Gamper y una vida entregada al FC Barcelona (2001), de Agustín Rodas, y De Hans Gamper a Joan Gamper: una biografía emocional (2008), de su nieta Emma Gamper.
Con un grupo de amigos empezó a practicar el fútbol en el barrio de Sant Gervasi y tuvo la idea de crear un club, al estilo de los que ya había en Francia y en Suiza. Efectuó una llamada por medio de una gacetilla publicada en Los Deportes y el 29 de noviembre de 1899 se constituyó el Foot-ball Club Barcelona en una reunión celebrada en el local del Gimnasio Solé. No quiso ser el primer presidente, se centró a jugar, y fue el jugador más destacado del fútbol catalán de los primeros años, actuando de delantero centro. Entre 1899 y 1903, año que se retiró, marcó 118 goles en 48 partidos. Después continuó siendo el alma del club, del que fue presidente en cinco etapas, la primera a partir del 2 de diciembre de 1908, cuando la entidad estaba a punto de desaparecer a causa de una gran crisis. Relanzó el club e inauguró el campo de la calle de la Industria. Fue presidente hasta el 14 de octubre de 1909. Su segunda etapa abarcó desde el 17 de noviembre de 1910 hasta el 30 de junio de 1913. Aquí luchó contra el profesionalismo que estaba creciendo y determinó que el club se retirara de la federación catalana durante un periodo. En el tercer mandato, del 17 de junio de 1917 al 19 de junio de 1919, ingresaron en el club dos figuras míticas como fueron Samitier y Zamora. En el cuarto, del 17 de julio de 1921 al 29 de junio de 1923, inauguró el campo de las Cortes, consolidó la economía e iniciar la llamada edad de oro con grandes éxitos deportivos. En este periodo, Gamper fue objeto de un partido de homenaje celebrado en el campo de las Cortes el 25 de febrero de 1923, que enfrentó al Barça y una selección catalana. La última etapa, el 1 de junio de 1924 al 17 de diciembre de 1925, fue marcada por la celebración de las bodas de plata del club y por la clausura del campo de las Cortes por Milans del Bosch durante la Dictadura de Primo de Rivera, después de que el público pitara el himno español, en un homenaje al Orfeó Catalán. Gamper tuvo que dejar la presidencia y fue conminado a exiliarse acusado de fomentar el catalanismo.
En total ocupó nueve años la presidencia y bajo su mandato el Barça se proclamó cuatro veces campeón de la Copa de España, seis del Campeonato de Catalunya y tres de la Copa Pirineos. En la etapa de jugador ganó una Copa Macaya (1902) y una Copa Barcelona (1903). También disputó la final del primer Campeonato de España (1902) que el Barça perdió con el CF Vizcaya. Influyó decisivamente sobre la creación de la Federación Española de Fútbol (1909). Tras exiliarse en Suiza, pudo volver a Barcelona con la condición de no tener ningún vínculo con el club.
En su recuerdo hay un busto en el palco presidencial del Camp Nou. En diciembre de 1933 el Ayuntamiento de Barcelona le dedicó una calle y en 1966 el club instauró un torneo veraniego llamado Trofeo Joan Gamper. Igualmente, el 1 de junio de 2006 el club inauguró oficialmente la nueva ciudad deportiva que lleva su nombre. Se han publicado algunas biografías como Joan Gamper y una vida entregada al FC Barcelona (2001), de Agustín Rodas, y De Hans Gamper a Joan Gamper: una biografía emocional (2008), de su nieta Emma Gamper.
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