La remontada se ha iniciaba de la mejor manera, con un gol de cabeza de
Luis Suárez en el primer minuto, tras aprovechar una indecisión de Trapp
(1-0, min 2). Además, el marcador al descanso (2-0) ya invitaba al
optimismo. Pero no sólo por el resultado, sino por las sensaciones. El
Barça había ahogado al PSG, y practicamente lo tenían reculado en su
propio campo, y se iban sucediendo las ocasiones blsugrana. El ejemplo
perfecto de la convicción fue precisamente, el segundo gol. Una jugada
luchada de Andrés Iniesta desde el interior del área, que le robsbs ls
cartera a Marquinhos y ha acabado con el gol en propia portería de
Kurzawa (2-0, min 40).Un 2-0 que dejaba tocado al equipo de Emery, que sólo ha tenido en la pelota parada y en alguna pérdida blaugrana la posibilidad de hacer daño. Pero a diferencia de 2-0, el 3-0 de Leo Messi, que ha transformado un penalti que Meunier ha cometido sobre Neymar (3-0, min 49), hizo que el PSG comprendiera que, si quería pasar la eliminatoria, se tenía que quitar el miedo e intentar marcar como mínimo un gol
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