El 16 de febrero de 1925, se jugaba un derby ciudadano contra el RCE
Espanyol en el Campeonato de Catalunya. Aquel día Pep Samitier recibía
un balonazo en el estómago, lo que provoco que fuera antendido en la
banda mientras sus compañeros luchaban contra el rival. Incluso se
retira al vestuario lo que hacia temer una lesión. Pero vuelve al cesped
y en el minuto 30 de juego, Samitier recoge un balón de la defensa y
avanza desde medio campo sorteando con agilidad inigualable a cuantos
contrarios se le oponen al llegar al área perica le acosan Saprisa y
Canals pareciendo imposible que pueda burlarlos, pero el Samitier en un
rápido sprint se adelanta hasta tres metros de Zamora y con gran
serenidad coloca un soberbio disparo imparable por el ángulo izquierdo
sin que su amigo Ricardo Zamora pueda hacer nada para evitar el tanto.
Sería el gol que daría la victoria por la mínima al FC Barcelona
RCE Espanyol-FC Barcelona 0-1
Espanyol: Zamora, Saprissa, Canals, Trabal, Pelao, Caicedo, Mallorqui, Llauger, Zabalo, Mauri, Colls.
Barcelona: Platko, Planas, Walter, Elias, Sancho, Carulla, Piera, Torralba, Samitier, Arnau, Sagi Barba.
Gol: 0-1 Samitier