Adrián Ortolà (Xàbia, 20 de
agosto de 1993), portero del Villarreal B, es el principal candidato a
convertirse la próxima temporada en el titular del Barça B.
La etapa de Oier Olazabal en el filial, tras una temporada con Guardiola, tres con Luis Enrique y dos con Eusebio, toca a su fin y el club azulgrana ya ha decidido buscarle un relevo.
Y tras dos años de un seguimiento exhaustivo a las principales perlas del fútbol español, entre las que se encuentran Kepa y Álex Remiro, del Athletic, Diego Mariño, del Villarreal, y Julián Cuesta, del Sevilla, el elegido parece que será el citado Ortolà.
Adrián es un fijo en las inferiores de la selección española, con la que ha logrado los tres últimos veranos un subcampeonato de Europa Sub-17 (2010) y dos campeonatos de Europa Sub-19 (2011 y 2012), aunque en estos dos últimos de suplente, el primero de Edgar Badia y el segundo de Kepa. Ha coincidido con varios azulgrana, pero con solo uno en los tres: Gerard Deulofeu.
Pese a que no es muy alto (mide 1,82 m.), los técnicos que le han seguido afirman que su estilo es prácticamente idéntico al de David de Gea: destaca por su poderoso juego aéreo, es bueno evitando goles en acciones de uno contra uno, técnicamente es bueno en el blocaje, es ágil y su juego de pies es bastante aceptable.
Su principal defecto, como la del meta del Manchester United, es su irregularidad, ya que alterna acciones espectaculares con algún que otro error infantil. Pero a quien admira Ortolà es a Víctor Valdés, una de sus dos referencias desde que debutó en el Camp Nou en 2003. La otra es su hermano, que también juega de portero, en el CD Jávea.
Los canteranos del Barça que conviven con él cuentan que es amigable y buen compañero. Y que sus mejores virtudes son su capacidad de trabajo y su humildad. Le encanta la cocina y su tiempo libre lo pasa en el cine y, de vacaciones, en las pistas de tenis y pádel.
Ortolà no atraviesa por su mejor momento. Acaba contrato con el Villarreal, que ya le ha pedido pedido en varias ocasiones iniciar las negociaciones para renovar, pero el portero no ha accedido y por este motivo apenas juega en el filial del conjunto amarillo.
En El Madrigal sospechan que ya tiene un acuerdo firmado con el Barça, aunque también saben que el Madrid anda detrás suyo. Lo que es seguro es que pronto jugará en un grande.
La etapa de Oier Olazabal en el filial, tras una temporada con Guardiola, tres con Luis Enrique y dos con Eusebio, toca a su fin y el club azulgrana ya ha decidido buscarle un relevo.
Y tras dos años de un seguimiento exhaustivo a las principales perlas del fútbol español, entre las que se encuentran Kepa y Álex Remiro, del Athletic, Diego Mariño, del Villarreal, y Julián Cuesta, del Sevilla, el elegido parece que será el citado Ortolà.
Adrián es un fijo en las inferiores de la selección española, con la que ha logrado los tres últimos veranos un subcampeonato de Europa Sub-17 (2010) y dos campeonatos de Europa Sub-19 (2011 y 2012), aunque en estos dos últimos de suplente, el primero de Edgar Badia y el segundo de Kepa. Ha coincidido con varios azulgrana, pero con solo uno en los tres: Gerard Deulofeu.
Pese a que no es muy alto (mide 1,82 m.), los técnicos que le han seguido afirman que su estilo es prácticamente idéntico al de David de Gea: destaca por su poderoso juego aéreo, es bueno evitando goles en acciones de uno contra uno, técnicamente es bueno en el blocaje, es ágil y su juego de pies es bastante aceptable.
Su principal defecto, como la del meta del Manchester United, es su irregularidad, ya que alterna acciones espectaculares con algún que otro error infantil. Pero a quien admira Ortolà es a Víctor Valdés, una de sus dos referencias desde que debutó en el Camp Nou en 2003. La otra es su hermano, que también juega de portero, en el CD Jávea.
Los canteranos del Barça que conviven con él cuentan que es amigable y buen compañero. Y que sus mejores virtudes son su capacidad de trabajo y su humildad. Le encanta la cocina y su tiempo libre lo pasa en el cine y, de vacaciones, en las pistas de tenis y pádel.
Ortolà no atraviesa por su mejor momento. Acaba contrato con el Villarreal, que ya le ha pedido pedido en varias ocasiones iniciar las negociaciones para renovar, pero el portero no ha accedido y por este motivo apenas juega en el filial del conjunto amarillo.
En El Madrigal sospechan que ya tiene un acuerdo firmado con el Barça, aunque también saben que el Madrid anda detrás suyo. Lo que es seguro es que pronto jugará en un grande.
