El 23 de noviembre de 1994, el equipo blaugrana viajaba a Estambul para jugar un partido de la fase grupos de la Champions League contra el Galatasaray SK. El Barça ganaba 0-1 con gol de Romario (que dos meses después pegó la espantada...), pero el Toro del Bósforo, Hakan Sukur, empató el partido de penalti en el min. 72. Pero en el minuto 88, Arif Erdem, un mediapunta de cierta calidad, disparó con el interior de su pierna derecha. En la portería del Barça estaba Carles Busquets que paró el balón con suficiencia. Sin embargo, y de manera inverosímil, no mantuvo el equilibrio y se metió con el balón dentro de la portería. La imagen hubiese sido hoy viral. El Galatasaray ganaba 2-1 y el portero arrastró aquella secuencia toda su carrera. Difícil saber si Carles Busquets sacó ese tema alguna vez en una comida cualquiera en casa con sus hijos Aitor y Sergio