Hansi Krankl fue el primer extarnjero que ficharia Josep Lluis Núñez como presidente del FC
Barcelona.
Y su fichaje se puede considerar casi, casi como rocambolesco. El Rapid de Viena, club donde en la temporada anterior Krankl había ganado la "Bota de Oro", intentaba por casi todos los medios vender a su estrella más carismática. Despues del gran mundial de Argentina.
Krankl era el bocado apetecible por parte de la mayoría de los clubs. El que se llevó el "gato al agua" sería el CF Valencia que llegó a un acuerdo con el Rapid de Viena para el traspaso del jugador. Incluso, en unas rotundas manifestaciones públicas,el presidente Ramon Costa se había adjudicado el jugador a su equipo... Sin embargo habría un ordago a la mayor. El presidente Josep Lluis Núñez lograría su objetivo en el viaje relámpago efectuado al Centro de Europa, y apoyándose en una cláusula que, aparentemente, pasó desapercibida al club levantino, se llevaría el gato al agua.
En efecto, en el famoso compromiso que suscribió el Valencia con el Rapid de Viena, se especificaba en el apartado tercero, que caso de que el jugador no estuviera conforme, el compromiso quedaba anulado... Y Krankl cambio su billete de viaje a Valencia por uno a Barcelona. Como es lógico, la noticia fue acogida de forma muy diversa en los dos equipos afectados.
Para el FC Barcelona constituia la esperanza de disponer de un elemento que había acreditado, a través de las últimas campañas como en su actuación en Argentina, que pisaba el área con decisión y que veía puerta con facilidad.
Imaginaros para el Valencia, ha sido toda una "bofetada", y califico de poco ética la intervención del cuadro azulgrana. Tanto fue el follón que... Un portavoz de la Fedéració se limitaria a declarar:
- Lo único que podemos decir oficialmente es que si se presenta un contrato con Krankl, precisara para su aceptación la conformidad jurada del propio jugador.
Es evidente que Hansi Krankl quería jugar en el Barça... y el Barça pagó 70 millones por sus servicios.
Barcelona.
Y su fichaje se puede considerar casi, casi como rocambolesco. El Rapid de Viena, club donde en la temporada anterior Krankl había ganado la "Bota de Oro", intentaba por casi todos los medios vender a su estrella más carismática. Despues del gran mundial de Argentina.
Krankl era el bocado apetecible por parte de la mayoría de los clubs. El que se llevó el "gato al agua" sería el CF Valencia que llegó a un acuerdo con el Rapid de Viena para el traspaso del jugador. Incluso, en unas rotundas manifestaciones públicas,el presidente Ramon Costa se había adjudicado el jugador a su equipo... Sin embargo habría un ordago a la mayor. El presidente Josep Lluis Núñez lograría su objetivo en el viaje relámpago efectuado al Centro de Europa, y apoyándose en una cláusula que, aparentemente, pasó desapercibida al club levantino, se llevaría el gato al agua.
En efecto, en el famoso compromiso que suscribió el Valencia con el Rapid de Viena, se especificaba en el apartado tercero, que caso de que el jugador no estuviera conforme, el compromiso quedaba anulado... Y Krankl cambio su billete de viaje a Valencia por uno a Barcelona. Como es lógico, la noticia fue acogida de forma muy diversa en los dos equipos afectados.
Para el FC Barcelona constituia la esperanza de disponer de un elemento que había acreditado, a través de las últimas campañas como en su actuación en Argentina, que pisaba el área con decisión y que veía puerta con facilidad.
Imaginaros para el Valencia, ha sido toda una "bofetada", y califico de poco ética la intervención del cuadro azulgrana. Tanto fue el follón que... Un portavoz de la Fedéració se limitaria a declarar:
- Lo único que podemos decir oficialmente es que si se presenta un contrato con Krankl, precisara para su aceptación la conformidad jurada del propio jugador.
Es evidente que Hansi Krankl quería jugar en el Barça... y el Barça pagó 70 millones por sus servicios.