El 15 de marzo de 1993, Ramón Mendoza y sus directivos declaraban la
guerra a todo el mundo, pero era el Barcelona su principal objetivo.
Árbitros, Federación Española de Fútbol, prensa y, por encima de todos,
el club blaugrana que se convertian en los puntos negros sobre los que
se disparaba ininterrumpidamente desde la Casa Blanca. El presidente del
Real Madrid (Ramon Mendoza) se reafirmaba y endureció sus críticas del
día anterior, después de que el CD Logroñés se llevara un punto el
domingo del Santiago Bernabéu al lograr empatar "inextremis" e igualaba
aún más la liga.
En declaraciones a la prensa, decía:
"Sigo pensando lo mismo que el domingo. El árbitro perjudicó notablemente al Real Madrid. Yo no quiero decir que exista un complot contra nosotros, pero sí que desde Barcelona y más sitios se está influyendo para que esto ocurra" [...] "En Catalunya siempre se están quejando de sus problemas, lo hacen desde el siglo XIX. Pero no pasa nada. Nadie les dice nada. Sin embargo, cuando lo hace el Real Madrid, inmediatamente se dice que somos gente sucia, dura, revolucionaria y depredadora. Estoy más que harto. Ahora que lo pienso, lo cierto es que quizá sea mejor callarse porque de todas formas ellos van a seguir haciendo lo que quieren. Yo creo que lo mejor que pueden hacer las autoridades deportivas para solucionar todo este problema es que le pongan una multa a Luis Milla y todos tan contentos" [...] "Si esto no cambia, será difícil alcanzar al Barcelona" [...] "No quiero meterme en estos temas, pero me parece exagerado y serio meter a los políticos en estos temas" (en alusion a César Augusto Lendoiro, presidente del Deportivo, al denunciar un complot político para impedir que el equipo gallego pueda ganar la Liga, contadiciendose de sus anteriores palabras" [...]
En declaraciones a la prensa, decía:
"Sigo pensando lo mismo que el domingo. El árbitro perjudicó notablemente al Real Madrid. Yo no quiero decir que exista un complot contra nosotros, pero sí que desde Barcelona y más sitios se está influyendo para que esto ocurra" [...] "En Catalunya siempre se están quejando de sus problemas, lo hacen desde el siglo XIX. Pero no pasa nada. Nadie les dice nada. Sin embargo, cuando lo hace el Real Madrid, inmediatamente se dice que somos gente sucia, dura, revolucionaria y depredadora. Estoy más que harto. Ahora que lo pienso, lo cierto es que quizá sea mejor callarse porque de todas formas ellos van a seguir haciendo lo que quieren. Yo creo que lo mejor que pueden hacer las autoridades deportivas para solucionar todo este problema es que le pongan una multa a Luis Milla y todos tan contentos" [...] "Si esto no cambia, será difícil alcanzar al Barcelona" [...] "No quiero meterme en estos temas, pero me parece exagerado y serio meter a los políticos en estos temas" (en alusion a César Augusto Lendoiro, presidente del Deportivo, al denunciar un complot político para impedir que el equipo gallego pueda ganar la Liga, contadiciendose de sus anteriores palabras" [...]