El 16 de noviembre de 1979, saltaba una noticia. El colegiado castellano Jacinto de Sosa, había recibido en su condición de representante de los árbitros de Primera División, una carta firmada por el presidente del FC. Barcelona, Josep Lluis Núñez, en la que intentaba matizar conceptos a cerca de la polémica suscitada a raíz de la famosa reunión de presidentes de clubs de Primera, en la que dijo que los árbitros favorecían al Real Madrid.
El señor Núñez intenta matizar su criterio, a la vez que no comprende cómo sus palabras, pronunciadas en una reunión privada, trascendieron de tal forma. Pretendía decir el presidente blaugrana, según manifiesta en la carta dirigida a Jacinto de Sosa, que deben mejorarse las estructuras para que los árbitros no tuvieran ningún tipo de condicionamientos más allá del propio juego. Añadía que siente un gran respeto por lo colegiados y que ello está dispuesto a aclararlo en la siguiente reunión de presidentes y árbitros de Primera
El señor Núñez intenta matizar su criterio, a la vez que no comprende cómo sus palabras, pronunciadas en una reunión privada, trascendieron de tal forma. Pretendía decir el presidente blaugrana, según manifiesta en la carta dirigida a Jacinto de Sosa, que deben mejorarse las estructuras para que los árbitros no tuvieran ningún tipo de condicionamientos más allá del propio juego. Añadía que siente un gran respeto por lo colegiados y que ello está dispuesto a aclararlo en la siguiente reunión de presidentes y árbitros de Primera