(Sport)
Casi veinte años atrás, Johan Cruyff, el técnico que marcó un punto de inflexión en la historia del barcelonismo, pronunció un discurso similar al de Guardiola en la sala de prensa del Calderón. Era el domingo 3 de marzo de 1992 y la afición azulgrana abandonó el Camp Nou decepcionada tras el empate a uno del Barça ante el Burgos. El Madrid había derrotado en el Bernabéu al Zaragoza por 2 a 0 y el Atlético había asaltado el Sánchez Pizjuán de Sevilla con un triunfo por la mínima.
El panorama para el Barça no era nada positivo: a falta de cinco jornadas el Madrid lideraba el campeonato con 49 puntos (más uno por la diferencia de goles) y el Atlético era segundo con 46. El Barça, con 45, y con las victorias premiadas con dos puntos, veía lejos sus opciones de revalidar el título. Sin embargo, el discurso a modo de premonición de Cruyff, jamás se cumpliría y la Liga volvería a las vitrinas del Barça, tras un final de campeonato en el que el Barça se mostró muy sólido y el Madrid, con toda la responsabilidad y obligación de ganar, acabó sucumbiendo en las últimas tres jornadas, con la hecatombe de Tenerife como guinda final.
El 'president' Núñez fue tajante al término del encuentro al afirmar: "creo que hemos regalado la Liga". Y Cruyff no quiso quedarse atrás y ratificó la opinión del presidente. "Estoy de acuerdo. La Liga está perdida", declaró, tras reconocer que "ha existido una diferencia clara entre el equipo del año pasado y el de éste".
El técnico holandés también quiso extraer una lectura positiva al virtual adiós al campeonato al afirmar que "no influirá para nada en la final de la Copa de Europa". Un discurso que también guarda similitudes con el de Guardiola tras el partido en el Calderón, ya que Pep 'celebró' que seguir compitiendo en Liga será clave para preparar la final de Copa y estar fuertes en Champions.
El toque de atención de Cruyff a sus jugadores -llegó a declarar que hacía semanas que el equipo no rendía a su nivel- acabó espoleando a una plantilla que acabó cosechando la segunda Liga consecutiva y la primera Copa de Europa de la historia del club. Guardiola aplicó el modelo al término del partido en el Calderón veinte años después, donde aumentan hasta a diez los puntos respecto al Madrid. El guión vuelve a repetirse. A buen seguro que este Barça, con el legado de las remontadas del 'Dream Team' en el horizonte, querrá poner en entredicho la vieja cantinela de que "segundas partes nunca fueron buenas"
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Pep ha debutado aquella temporada en el primer equipo y debió aprender que es una forma de motiva a tus jugadores, decirles que no son capaces de dar la vuelta a la tortilla. Y cuando encuentras un grupo que es de autenticos profesionales, lo intentaran hasta que matematicamente sea imposible, en eso consiste las declaraciones...
Incluso hay una anecdota de un entrenador del Barça, que después ir perdiendo por 2-0 la primera parte, entro en el vestuario con sus jugadores, saco un maletin de una taquilla y dijo:
- "El presidente esta conteto, se ahorrara la prima"
Y enseño ese maletín que estaba repleto de billetes, al final del partido el Barça se imponía por un 2-4.