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El brasileño del Barça, Dani Alves, lamentó los brotes xenófobos que se viven en los campos de fútbol españoles, y de los que vivió un episodio en el Santiago Bernabéu el miércoles en el partido de Copa, de que se le haya cuestionado cuando ha estado lesionado, y de que los árbitros no controlen las actitudes agresivas de los jugadores del Real Madrid en los clásicos.
"Estamos
cabreados por las circunstancias del juego, porque fuimos superiores pero no aprovechamos bien todas las ocasiones que tuvimos; pero sabemos que será el partido de vuelta el que decidirá", dijo respecto al encuentro de la Copa frente al Real Madrid.
Para Dani, no es extraño "
que estén contentos con el empate. El Barça es ahora el equipo a batir y cualquiera, incluso jugando en su casa, ya está contento si no pierde". Alves está convencido de que en el partido de vuelta el conjunto blaugrana sentenciará el pase a la final.
Alves también explicó, sobre
los gritos racistas de que fue objeto en el Bernabéu durante el partido: "No me planteé irme del campo, pero
es molesto". Sí que puntualizó que "no es en este campo en concreto. Normalmente vivo esto continuamente en todos los campos que voy en España. Es una lástima porque puedes caer mejor o peor a una afición y hay momentos de calentura,
pero eso sobra".
Dani piensa que es "desgraciadamente, una guerra perdida hasta que no se tomen medidas más drásticas.
Llevo diez años aquí en España y desde el primer año suceden estas cosas. No solo en este campo, en todos, también en Sevilla".
Para el internacional brasileño la única solución "no es poner mil o dos mil euros de multa, que no son nada para estos clubs. En Inglaterra, por ejemplo, no pasa. Y si pasa, las medidas son mucho más drásticas". Tanto en este aspecto, como en la deljuegpo violento, "
es una cuestión de falta de personalidad de los que se encargan",
en referencia a los árbitros.
"YO, A MÍ, ME QUIERO MUCHO"
También quiso dejar al margen las informaciones que hablan de
piques verbales entre Leo Messi y algún jugador del Real Madrid, como Arbeloa o Xabi Alonso, que le sometieron a marcajes especialmente duros o que incluso le propinaron algún manotazo y no acabaron expulsados pese a la reiteración de faltas. "Es lo que decíamos de la personalidad de los que mandan. De todas formas,
yo las cosas que pasan en el campo, las dejó en el campo", zanjó la cuestión.
Alves habló sobre su situación personal y dijo estar contento de que vuelve a estar a su nivel habitual. Eso sí, se quejó de que "cuando se lesiona cualquiera no pasa nada;
en cambio, si se lesiona Dani (por él mismo), siempre parece que hay algo más. Me sabe mal por mi gente que saben cómo me tomo mi profesión. ¿Si me siento valorado? Yo, a mí, me quiero mucho", bromeó, para después darse un par de besos con las manos.
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Por desgracia tampoco nosotros podemos escaparnos de que unos cortos de entendederas se dediquen a salir de sus jaulas en el zoologico e intentar comportarse como los chimpaces, creyendo que eso hace gracia. La verdad es que si luego no saben volver a sus jaulas... ¿por que se salen?
La ventaja del Barça es que por lo menos aqui se ha intentado y se esta logrando erradicar la violencia de los estadios, cosa que otros equipos no solo los protege, no solo les "regala entradas", no solo les rebaja el precio de las entradas de los campos donde acuden como visitante, sino que también les permite tener su propia jaula en el Zoologico que se ha convertido el Bernabeu.
