Mundo Deportivo
La cara de Andrés Iniesta en el aeropuerto de El Prat antes de volar hacia Barajas decía muchas cosas. A paso ligero, con decisión y directo a la puerta de embarque con una autoconfianza en sí mismo que apreciaron quienes cruzaron un simple saludo con él. El genio de Fuentealbilla empezó a jugar el Clásico de buena mañana. De hecho, ya se calzó las botas entre semana cuando hizo acto de presencia en la sala de prensa de la Ciutat Esportiva para prometer un Barça valiente ante el Real Madrid. Y quién mejor que él para cumplir su palabra y tirar del carro junto a Leo Messi para reenganchar al equipo a la pelea por su quinta Liga en seis temporadas. Sería además la séptima de la carrera de un Iniesta que alcanzó el domingo los 50 goles con el primer equipo azulgrana.
No había marcado en Chamartín y sólo tardó siete minutos en aprobar una asignatura pendiente que, sin embargo, no admitía una nota tan baja. Don Andrés quería la matrícula de honor para cumplir con la tradición que acompaña sus tantos. Su medio centenar de dianas (33 en Liga, 10 en Champions, seis en Copa y uno en la Supercopa española) en otros tantos encuentros como barcelonista nunca se han visto unidos a una derrota. Esos 50 partidos en los que ha visto puerta se han saldado con 46 triunfos y sólo cuatro empates. Uno de ellos tuvo un gran sabor a victoria. Fue el 'Iniestazo' en Stamford Bridge en la vuelta de 'semis' de la Champions 2008-09 en el feudo del Chelsea (1-1). Tres temporadas después, en el Camp Nou, su tanto en el 2-2 no sirvió para acceder a la final de Múnich. Las otras dos tablas se remontan a la temporada 2007-08: 2-2 en Lyon y 1-1 en Montjuïc ante el Espanyol. Tampoco ha perdido en sus 11 duelos como goleador con la selección española absoluta: 10 victorias y un empate en Islandia (1-1) en la fase clasificatoria del Euro-2008.
Iniesta se había metido entre ceja y ceja salir del Bernabéu a un punto del Madrid y ni los dos tantos de Karim Benzema ni elpenalti transformado por Cristiano Ronaldo truncaron su misión. Resultó realmente inolvidable el silencio que prácticamente se apoderó de la grada madridista cada vez que el manchego y Messi se hacían con el balón. Era una sensación a medio camino entre el pánico y la admiración. Ese temor con un efecto anestesiante se trasladó incluso a los jugadores de Carlo Ancelotti, que no hallaron el antídoto para frenarles. El penalti que le hicieron entre Xabi Alonso y Carvajal es el mejor ejemplo de la impotencia local ante la chistera de un mago empeñado en dejar una huella más en el Bernabéu. Leo multiplicó la importancia de aquella pena máxima transformándola a seis minutos del final.
Más cuentas pendientes
Sólo el argentino, con seis, superó los tres remates de Iniesta, que fue además el tercer azulgrana que más pelotas recuperó. Piqué (17) lideró de largo el ránking por delante de Busquets (7) y el dúo formado por Andrés y Alba (6). La sociedad que Andrés forma con Leo es el principal motivo para que los culés sueñen con conquistar los tres títulos. La Liga es el torneo al que Iniesta siempre da más valor por ser el sinónimo de la regularidad pero en Champions y Copa tiene cuentas pendientes. En su última visita al Calderón le dejaron fuera de combate en el minuto 45 y en Mestalla vio cómo el Madrid, con Undiano Mallenco de aliado, le birlaba la primera final copera que jugaba
Por ahora Iniesta ha marcado en 50 partidos y el Barça cuando marca Iniesta no pierde, su balance es de 46 victorias y 4 empates.
Iniesta hizo un partidazo. Poniendo juntos a Iniesta-Messi-Xavi-Busi-Cesc somos el no va más y el equipo funciona, pero es algo que ha aprendido poco a poco Martino y que en las 9 jornadas que quedan, espero que no se le ocurra una nueva "Martinada", como contra la Real Sociedad o el Valladolid, donde se debería haber puntuado
La cara de Andrés Iniesta en el aeropuerto de El Prat antes de volar hacia Barajas decía muchas cosas. A paso ligero, con decisión y directo a la puerta de embarque con una autoconfianza en sí mismo que apreciaron quienes cruzaron un simple saludo con él. El genio de Fuentealbilla empezó a jugar el Clásico de buena mañana. De hecho, ya se calzó las botas entre semana cuando hizo acto de presencia en la sala de prensa de la Ciutat Esportiva para prometer un Barça valiente ante el Real Madrid. Y quién mejor que él para cumplir su palabra y tirar del carro junto a Leo Messi para reenganchar al equipo a la pelea por su quinta Liga en seis temporadas. Sería además la séptima de la carrera de un Iniesta que alcanzó el domingo los 50 goles con el primer equipo azulgrana.
No había marcado en Chamartín y sólo tardó siete minutos en aprobar una asignatura pendiente que, sin embargo, no admitía una nota tan baja. Don Andrés quería la matrícula de honor para cumplir con la tradición que acompaña sus tantos. Su medio centenar de dianas (33 en Liga, 10 en Champions, seis en Copa y uno en la Supercopa española) en otros tantos encuentros como barcelonista nunca se han visto unidos a una derrota. Esos 50 partidos en los que ha visto puerta se han saldado con 46 triunfos y sólo cuatro empates. Uno de ellos tuvo un gran sabor a victoria. Fue el 'Iniestazo' en Stamford Bridge en la vuelta de 'semis' de la Champions 2008-09 en el feudo del Chelsea (1-1). Tres temporadas después, en el Camp Nou, su tanto en el 2-2 no sirvió para acceder a la final de Múnich. Las otras dos tablas se remontan a la temporada 2007-08: 2-2 en Lyon y 1-1 en Montjuïc ante el Espanyol. Tampoco ha perdido en sus 11 duelos como goleador con la selección española absoluta: 10 victorias y un empate en Islandia (1-1) en la fase clasificatoria del Euro-2008.
Iniesta se había metido entre ceja y ceja salir del Bernabéu a un punto del Madrid y ni los dos tantos de Karim Benzema ni elpenalti transformado por Cristiano Ronaldo truncaron su misión. Resultó realmente inolvidable el silencio que prácticamente se apoderó de la grada madridista cada vez que el manchego y Messi se hacían con el balón. Era una sensación a medio camino entre el pánico y la admiración. Ese temor con un efecto anestesiante se trasladó incluso a los jugadores de Carlo Ancelotti, que no hallaron el antídoto para frenarles. El penalti que le hicieron entre Xabi Alonso y Carvajal es el mejor ejemplo de la impotencia local ante la chistera de un mago empeñado en dejar una huella más en el Bernabéu. Leo multiplicó la importancia de aquella pena máxima transformándola a seis minutos del final.
Más cuentas pendientes
Sólo el argentino, con seis, superó los tres remates de Iniesta, que fue además el tercer azulgrana que más pelotas recuperó. Piqué (17) lideró de largo el ránking por delante de Busquets (7) y el dúo formado por Andrés y Alba (6). La sociedad que Andrés forma con Leo es el principal motivo para que los culés sueñen con conquistar los tres títulos. La Liga es el torneo al que Iniesta siempre da más valor por ser el sinónimo de la regularidad pero en Champions y Copa tiene cuentas pendientes. En su última visita al Calderón le dejaron fuera de combate en el minuto 45 y en Mestalla vio cómo el Madrid, con Undiano Mallenco de aliado, le birlaba la primera final copera que jugaba
Por ahora Iniesta ha marcado en 50 partidos y el Barça cuando marca Iniesta no pierde, su balance es de 46 victorias y 4 empates.
Iniesta hizo un partidazo. Poniendo juntos a Iniesta-Messi-Xavi-Busi-Cesc somos el no va más y el equipo funciona, pero es algo que ha aprendido poco a poco Martino y que en las 9 jornadas que quedan, espero que no se le ocurra una nueva "Martinada", como contra la Real Sociedad o el Valladolid, donde se debería haber puntuado