Mundo Deportivo
El hermetismo sigue rodeando la situación que vive Víctor Valdés, al que el Mónaco habría dejado en la estacada según publicó el pasado martes el diario francés L'Equipe. Durante el día de ayer, MD intentó ponerse en contacto con su representante, Ginés Carvajal, quien el martes no respondió a los requerimientos de esta redacción. Ayer por la tarde, finalmente, sí lo hizo pero para asegurar escuetamente que no tenía "nada que comentar" sobre la situación de Víctor, al tiempo que glosó la figura de su representado.
Por su parte, desde el FC Barcelona tampoco se quiere hacer demasiado ruido con este tema. De hecho, desde el club no se quiere dar ningún paso hacia Valdés por una cuestión de prudencia. Hace dos meses y medio, el presidente Josep Maria Bartomeu ya dijo públicamente que el portero, una vez ya se había lesionado, tenía "las puertas abiertas" del club. "Le hemos dicho que tiene al club a su disposición. Ahora está preocupado por su operación, lógicamente, pero sabe que tiene las puertas abiertas del club", recalcó Bartomeu, al tiempo que aseguró no tener "constancia de que haya firmado por ningún otro club".
La postura del Barça y de su presidente es a día de hoy la misma: Valdés tiene las puertas abiertas del club para recuperarse y para dirigirse a sus directivos si tiene alguna petición que hacerles. Eso sí, el paso debería darlo el propio Víctor o, en su caso, Ginés Carvajal, su representante.
Es decir, que el Barça escucharía una propuesta del jugador, pero debería ser Víctor quien pidiese que el club le escuchase. Desde el club se quiere actuar con mucha prudencia en esta situación tan delicada para el portero. En su día, el presidente ya le dijo a Víctor que estaba a su disposición para lo que necesitase. Aun así, Valdés prefirió marcharse sin recibir un homenaje como el que recibió el capitán, Carles Puyol. De hecho, al inicio de la misma semana en que el Barça se jugaba la Liga en casa ante el Atlético de Madrid, el portero reunió al equipo en el vestuario y se despidió de sus compañeros y de los técnicos de forma breve y escueta. Después vació su taquilla y se fue ya para no volver. La web de MD avanzó que Víctor había dicho adiós a sus compañeros. Aquel mismo día por la tarde, el club confirmaba esta información añadiendo que el portero se iba a Alemania a seguir con la segunda fase de su recuperación. De esa forma, se perdía el homenaje a Puyol –que se celebró días después– y el partido ante el Atlético en que su equipo se jugaba la Liga.
Desde entonces, muy poco se ha sabido de Víctor. Tras lesionarse, el jugador rompió relaciones con la empresa que llevaba su imagen. Habían estado cinco años juntos. En las redes sociales no ha enviado ningún mensaje desde el fallecimiento de Tito Vilanova. Sólo unas declaraciones de su mujer en que aseguraba que Víctor lo estaba pasando muy mal y la última carta de su hermano en facebook han dado cuenta de lo que se vive alrededor de Valdés, hasta el 30 de junio todavía jugador del Barça
Cuando una va al "casino" de Monaco y se lo juega todo al 21, tiene posibilidades de perder y perderlo todo. Es lo que le ha pasado a Valdes, una apuesta demasiado arriesgada, en un mundo tan imprevisible como es el del fútbol, donde una simple torcesura puede acabar con tu carrera.
Es verdad que el club se porto muy mal con el en las negociaciones, pero el se dejo influenciar por su entorno (pareja, representante, familia..) y quiso jugar fuerte y lo ha perdido todo. Incluso tras la lesión el Barça le ofreció renovar, el prefirió irse por la puerta de atras, no como Puyol dando la cara... sino con una carta, es una penosa manera de despedirse. Ahora ni Monaco (o eso parece), ni aquellos que le prometieron el oro y el moro, parecen dispuestos a jugarsela como él lo hizo, y debe apechugar con el error. El Barça no tiene que hacer nada, es él quien debe dejar de un lado ese orgullo o el de su enterno y dar algún paso, creo que el Barça tendra los brazos abiertos para el hijo pródigo
El hermetismo sigue rodeando la situación que vive Víctor Valdés, al que el Mónaco habría dejado en la estacada según publicó el pasado martes el diario francés L'Equipe. Durante el día de ayer, MD intentó ponerse en contacto con su representante, Ginés Carvajal, quien el martes no respondió a los requerimientos de esta redacción. Ayer por la tarde, finalmente, sí lo hizo pero para asegurar escuetamente que no tenía "nada que comentar" sobre la situación de Víctor, al tiempo que glosó la figura de su representado.
Por su parte, desde el FC Barcelona tampoco se quiere hacer demasiado ruido con este tema. De hecho, desde el club no se quiere dar ningún paso hacia Valdés por una cuestión de prudencia. Hace dos meses y medio, el presidente Josep Maria Bartomeu ya dijo públicamente que el portero, una vez ya se había lesionado, tenía "las puertas abiertas" del club. "Le hemos dicho que tiene al club a su disposición. Ahora está preocupado por su operación, lógicamente, pero sabe que tiene las puertas abiertas del club", recalcó Bartomeu, al tiempo que aseguró no tener "constancia de que haya firmado por ningún otro club".
La postura del Barça y de su presidente es a día de hoy la misma: Valdés tiene las puertas abiertas del club para recuperarse y para dirigirse a sus directivos si tiene alguna petición que hacerles. Eso sí, el paso debería darlo el propio Víctor o, en su caso, Ginés Carvajal, su representante.
Es decir, que el Barça escucharía una propuesta del jugador, pero debería ser Víctor quien pidiese que el club le escuchase. Desde el club se quiere actuar con mucha prudencia en esta situación tan delicada para el portero. En su día, el presidente ya le dijo a Víctor que estaba a su disposición para lo que necesitase. Aun así, Valdés prefirió marcharse sin recibir un homenaje como el que recibió el capitán, Carles Puyol. De hecho, al inicio de la misma semana en que el Barça se jugaba la Liga en casa ante el Atlético de Madrid, el portero reunió al equipo en el vestuario y se despidió de sus compañeros y de los técnicos de forma breve y escueta. Después vació su taquilla y se fue ya para no volver. La web de MD avanzó que Víctor había dicho adiós a sus compañeros. Aquel mismo día por la tarde, el club confirmaba esta información añadiendo que el portero se iba a Alemania a seguir con la segunda fase de su recuperación. De esa forma, se perdía el homenaje a Puyol –que se celebró días después– y el partido ante el Atlético en que su equipo se jugaba la Liga.
Desde entonces, muy poco se ha sabido de Víctor. Tras lesionarse, el jugador rompió relaciones con la empresa que llevaba su imagen. Habían estado cinco años juntos. En las redes sociales no ha enviado ningún mensaje desde el fallecimiento de Tito Vilanova. Sólo unas declaraciones de su mujer en que aseguraba que Víctor lo estaba pasando muy mal y la última carta de su hermano en facebook han dado cuenta de lo que se vive alrededor de Valdés, hasta el 30 de junio todavía jugador del Barça
Es verdad que el club se porto muy mal con el en las negociaciones, pero el se dejo influenciar por su entorno (pareja, representante, familia..) y quiso jugar fuerte y lo ha perdido todo. Incluso tras la lesión el Barça le ofreció renovar, el prefirió irse por la puerta de atras, no como Puyol dando la cara... sino con una carta, es una penosa manera de despedirse. Ahora ni Monaco (o eso parece), ni aquellos que le prometieron el oro y el moro, parecen dispuestos a jugarsela como él lo hizo, y debe apechugar con el error. El Barça no tiene que hacer nada, es él quien debe dejar de un lado ese orgullo o el de su enterno y dar algún paso, creo que el Barça tendra los brazos abiertos para el hijo pródigo
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