Sport
En junio de 1945 fue inaugurada la nueva tribuna
del campo de Les Corts, pero ya entonces había barcelonistas que
juzgaban necesario ir a un estadio más grande. Dos años más tarde, en
1947, el Real Madrid inauguró el estadio de Chamartín, lo que conmocionó
al barcelonismo y le hizo plantearse el gran salto, construir un
estadio nuevo aunque ya Les Corts había alcanzado una capacidad de
48.000 espectadores, más del doble respecto del aforo de 22.000 personas
que tenía cuando fue inaugurado en 1922.
El presidente en aquel tiempo, Agustí Montal Galobart, sugirió la idea del mejor estadio de España y de Europa, pero se refería a seguir ampliando Les Corts tras ganar la Liga 1947-48 en plena euforia social.
Pero todo cambió al principio de 1950 cuando el Barça recibió el ofrecimiento por parte de un propietario del distrito de Les Corts de un terreno, situado cerca de Maternidad al parecer lo bastante amplío para acoger un nuevo y gran estadio. La directiva nombró una comisión formada por los vicepresidentes Narcís de Carreras y Josep Mestre, el tesorero Enric Martí Carreto y el vocal Manel de Senillosa para estudiar el proyecto e iniciar conversaciones con el Ajuntament de Barcelona.
Cuentan las crónicas que "el día 7 de junio Senillosa informó de las últimas entrevistas con los propietarios del terreno e indicó las condiciones de la transacción. La superficie era de 2.104.000 palmos cuadrados y el precio de 9 millones de pesetas (4'27 pesetas el palmo cuadrado)". El 28 de septiembre de 1950, el presidente informó a sus compañeros de que el día anterior se había firmado una opción de compra válida por dos meses.
Entre levantar un estadio nuevo o ampliar Les Corts, aún existente cuando el Barcelona firmó la opción de compra de los nuevos terrenos, un estudio arquitectónico eliminó la segunda opción. Eusebi Bona, arquitecto encargado del informe realizado, afirmaba que como máximo se podrían ganar 8.000 plazasy eso a costa de alterar la estética y provocar graves problemas de accesos. En la primavera de 1950 ya se suspendieron una obras en el Gol Nord ante la posible operación de un nuevo estadio.
Sin embargo, por presiones políticas de la época hubo un intento de cambiar la ubicación a la entrada de la Diagonal abortado por el triunfo de Miró Sans en las elecciones de 1953, el presidente que finalmente emprendió con determinación la construcción del Camp Nou. Cómo se acabó pagando... eso ya fue otra historia.
Mientras el Barça estuvo años pagando esa deuda de la construcción del Estadio, otro club tenía el beneplacito de desviar los sacos de cemento que se "perdían" en la construcción del Valle de los Caidos, asi como material para edifica lo que sería más tarde el Santiago Bernabeu
Pero claro era una época donde se intentaba que los equipos que no fueran del Madrid (Real y Atletico) contaran poco en el panorama deportivo estatal. Asi fue como "secuestraron" a Di Stefano y algún jugador más. La Dictadura quería abrirse al Mundo y para eso se necesitaba un equipo fuerte en la Capital del Estado y el escogido fue el Real Madrid, del amigo intimo de Franco... Santiago Bernabeu
El presidente en aquel tiempo, Agustí Montal Galobart, sugirió la idea del mejor estadio de España y de Europa, pero se refería a seguir ampliando Les Corts tras ganar la Liga 1947-48 en plena euforia social.
Pero todo cambió al principio de 1950 cuando el Barça recibió el ofrecimiento por parte de un propietario del distrito de Les Corts de un terreno, situado cerca de Maternidad al parecer lo bastante amplío para acoger un nuevo y gran estadio. La directiva nombró una comisión formada por los vicepresidentes Narcís de Carreras y Josep Mestre, el tesorero Enric Martí Carreto y el vocal Manel de Senillosa para estudiar el proyecto e iniciar conversaciones con el Ajuntament de Barcelona.
Cuentan las crónicas que "el día 7 de junio Senillosa informó de las últimas entrevistas con los propietarios del terreno e indicó las condiciones de la transacción. La superficie era de 2.104.000 palmos cuadrados y el precio de 9 millones de pesetas (4'27 pesetas el palmo cuadrado)". El 28 de septiembre de 1950, el presidente informó a sus compañeros de que el día anterior se había firmado una opción de compra válida por dos meses.
Entre levantar un estadio nuevo o ampliar Les Corts, aún existente cuando el Barcelona firmó la opción de compra de los nuevos terrenos, un estudio arquitectónico eliminó la segunda opción. Eusebi Bona, arquitecto encargado del informe realizado, afirmaba que como máximo se podrían ganar 8.000 plazasy eso a costa de alterar la estética y provocar graves problemas de accesos. En la primavera de 1950 ya se suspendieron una obras en el Gol Nord ante la posible operación de un nuevo estadio.
Votaciones y asamblea
Durante los días 8, 9, 10, 11 y 12 de noviembre, en las oficinas del club situadas entonces en el pasaje Méndez Vigo, la Junta Directiva organizó un referéndum para decidir sobre la compra de los terrenos con un resultado que no dejó dudas: 7.835 votos a favor de la compra y 1.132 en contra. Dos días después una asamblea extraordinaria de compromisarios oficializó la compra efectiva de los terrenos del futuro Camp Nou, ratificando de este modo la voluntad popular.Sin embargo, por presiones políticas de la época hubo un intento de cambiar la ubicación a la entrada de la Diagonal abortado por el triunfo de Miró Sans en las elecciones de 1953, el presidente que finalmente emprendió con determinación la construcción del Camp Nou. Cómo se acabó pagando... eso ya fue otra historia.
Mientras el Barça estuvo años pagando esa deuda de la construcción del Estadio, otro club tenía el beneplacito de desviar los sacos de cemento que se "perdían" en la construcción del Valle de los Caidos, asi como material para edifica lo que sería más tarde el Santiago Bernabeu
Pero claro era una época donde se intentaba que los equipos que no fueran del Madrid (Real y Atletico) contaran poco en el panorama deportivo estatal. Asi fue como "secuestraron" a Di Stefano y algún jugador más. La Dictadura quería abrirse al Mundo y para eso se necesitaba un equipo fuerte en la Capital del Estado y el escogido fue el Real Madrid, del amigo intimo de Franco... Santiago Bernabeu
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