Javier Giraldo (Sport)
Aunque las sensaciones de esta temporada inviten a pensar en un David
Villa relegado a un papel más secundario, una comparación rápida con
sus cifras del año pasado arroja resultados sorprendentes: el delantero
asturiano suma tantos goles como la pasada temporada a estas alturas
y, curiosamente, con el mismo número de minutos disputados: 1.268 este curso por 1.260 del pasado. (
Es cierto que Villa ya ha sido suplente en 6 de los 20 partidos
oficiales que el Barça ha jugado esta temporada, mientras que el año
pasado solo lo había sido en uno, pero su reparto de minutos responde a
una política a largo plazo del cuerpo técnico. Sin lesiones de por
medio, Villa solo ha dejado de jugar un partido, ante el Viktoria
Pilzen. Guardiola ha insistido en que mantiene plena confianza en el
"Guaje" y sus últimas decisiones apuntan a un Villa más centrado en
partidos importantes, como el de mañana en Milán.
Su gol ante el Zaragoza dejó atrás una racha de seis partidos sin ver
puerta, desde su gol ante el Viktoria Pilzen. También marcó en el
último compromiso de la selección, en Costa Rica, y sigue siendo el
segundo máximo goleador del Barça en toda la temporada, por detrás de
Messi (24 goles) y por delante de Cesc, con siete tantos.
Después de salir desde el banquillo ante el Zaragoza, Villa apunta a
titular mañana en Milán. San Siro le trae buenos recuerdos al "Guaje".
allí, en un partido ante el Inter de Milán, firmó uno de los mejores
goles de su carrera, de falta directa y desde casi 35 metros.
También de falta anotó ante el Milan en el partido de la primera vuelta en el Camp Nou (2-2).
Superadas las molestias que le provocó la fisura que sufrió en la
tibia de la pierna derecha, Villa confía en recuperar su mejor nivel de
aquí a final de año y sobre todo, dejar atrás sus momentos más
difíciles desde que llegó al Barça: a sus molestias físicas se le
unieron los rumores sobre su relación con Messi y un cierto bajón
anímico que ha superado a base de goles.
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La verdad es que somos muy "pesimistas", a Villa yo creo que no hay otra
cosa que darle las gracias. Ha pasado y asumido de ser una de las
estrellas en todos los clubes, por los que ha pasado a ser un servidor
de Messi, sacrificándose pasar de ser un "9" a jugar iniciando casi
desde la cal las jugadas, muy abierto para dejar el camino libre para
que juegue el "delantero falso". Con todo y con eso el año pasado marcó
19 goles en liga, y 28 en total (en esta cuando se ha jugado apenas un
tercio lleva siete... o sea apunta a 21 como minimo), contando el
golazo de la final de la Champions de Wembley. Son números muy buenos
para alguien que tiene que defender al lateral contario, en las jugadas
de defensa y eso en su peor año
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