Cap. 740: La "primera" Junta Directiva en la dictadura franquista

 Para evitar que el club cayera en manos de algunos "rojos" que podían no estar fichados o catalanistas, el Gobernador Civil de Barcelona: Wenceslao González Oliveros recibió en enero de 1940, un informe donde se especificaba las condiciones politicas de los nuevos directivos del FC Barcelona. El Informe decía: "La directiva la constituyen los siguientes señores: Salvador Mújica Bohigas, general de división, como presidente; Jaime Sabaté Queixal, excombatiente como vicepresidente; Ignacio Ventosa Despujols, teniente del ejercito y teniente alcalde de Barcelona, como secretario; Juan Masó Llorens, director provincial de Sindicatos, como vicesecretario; Carlos Godó, propietario del diario La Vanguardia Española, como tesorero; Esteban Sala Soler, teniente del ejercito y excombatiente, como contador;y como vocales: Manuel Bravo Montero (Capitan de la Guardia Civil), Jose Pons Munbrú (excautivo), Bernjamin Gayubar Escobedo (Inspector productor de la Compañía de Seguros La Adriatica, de la Organización Juvenil de FET de las JONS), y Francisco Corbella (Capitan del Cuerpo Juridico Militar y Secretario de Justicia Militar en Burgos) Todos los citados son personas de buena conducta y afectos al Glorioso Movimiento Nacional, Dios guarde a VE muchos años. Barcelona 11 de enero de 1940. El Jefe Superior de Policia de Barcelona" Esta junta no duraría mucho, y el 13 de marzo de 1940 el CND (Consejo Nacional de Deportes), el COE (Comite Olimpico Español) y la FEF (Federación Española de Fútbol) acordaban con acabar con la provisionalidad de la Junta y nombraría la siguiente: Prsidente: Enrique Piñeiro Queralt, Marques de la Mesa y Asta y militar del ejercito de Franco Junto a él fueron elegidos: José Vidal-Ribas Güell, Amadeo Maristany, Tomás Maria Roses, Juan Agustí Peypoch, Amat Casajuana, José de Fontcuberta, Javier de Mendoza, Luis G. Novellas, Francisco Quintana, Ignacio Ribas, Ignacio Saignier y Jaime Sama Esta Junta quedó constituida, como he dicho, el 13 de marzo, y también fue controlada por la policia y los servicios de investigación de la Falange. El Gobernador recibió el informe en el que se especificaba, que cada uno de ellos era "adicto al Glorioso Movimiento Nacional" y en el se especificaba, incluso que Enrique Piñeiro había sido ayudante del General Moscardó y que tras la liberación de Barcelona, lo había recomendado para el cargo... Era una "buena persona y pertencía a la organización" (la Falange)