El 24 de octubre de 1984, la nota más destacada del entrenamiento fue el fuerte golpe que sufrió Schuster en la pierna izquierda y que hizo que tuviera que ser atendido por el masajista Jaume Langa durante unos minutos. Afortunadamente; la cosa no fue a mayores y Bernd pudo continuar la preparación que ya estaba tocando a su fin. Hay que añadir que Schuster en esos días estaba recibiendo sesiones de radio como consecuencia de un golpe en la rodilla del partido contra la Real Sociedad disputado tres días antes.
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