Aquel 15 de mayo de 1991, el fútbol inglés quería pasar página
definitivamente a uno de los capítulos más negros de toda su historia.
Aquella temporada era la primera en que la UEFA permitía la
participación en las competiciones continentales a los equipos de
Inglaterra, después de 5 años de suspensión como castigo por la tragedia
de Heysel: aquella maldita final de Copa de Europa entre la Juventus y
el Liverpool, que acabó con 39 aficionados italianos muertos por culpa
de los hooligans.Ganó el Manchester United por 2-1 y el gol de la victoria lo marcó Mark Hughes regateando a Carlos Busquets, que salió casi hasta el medio del campo, en una jugada absurda que costo el título. Zubizarreta estaba sancionado y en el banquillo el suplente era Angoy. También se debe recordar que se le anuló un gol a Antonio Pinilla que forzaba la prorroga.
Manchester United - FC Barcelona 2-1
Manchester: Sealy, Irwin, Blackmore, Bruce, Phelan, Pallister, Robson, Ince, McClair, Hughes, Sharpe.
Barcelona: Busquets, Nando, Alexanko (Pinilla), Koeman, Ferrer, Bakero, Goikoetxea, Eusebio, Salinas, Laudrup, Begiristain.
Goles: 1-0 Hughes, 2-0 Hughes, 2-1 Koeman
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