Etiqueta en el béisbol americano

Francesc Peiron (La Vanguardia)

Un consejo, por si alguien desea ponerle música a esta crónica. Se precisa uno de aquellos tocadiscos en forma de maleta, que al abrirse salía el plato por un lado y el altavoz por el otro, y un vinilo, por supuesto. Lo más apropiado es un single, sin olvidar que va a 45 revoluciones por minuto. Si chirría un poco por las rayas, que son como las arrugas del tiempo, todavía mejor.
Si resulta inalcanzable, al ser material de otra época, no hay que preocuparse. Porque para eso está YouTube. Sólo se debe escribir en el buscador: "Manolo Escobar-La minifalda".
Alguien dirá que todo esto es arqueología emocional. O preguntarse: ¿Qué hace un corresponsal en Nueva York, cumbre de la modernidad en el país puntero del mundo, escribiendo sobre algo tan rancio, herencia de una España retrógrada y franquista?
"No me gusta que a los toros te pongas la minifalda, no me gusta que a los toros vayas con la minifalda...".
Fue Nietzsche quien teorizó sobre el eterno retorno, sobre la circularidad de la historia. A ese estribillo que está sonando sólo se le han de sustituir los toros por el béisbol para entender lo oportuno de la cita musical.
Las Ligas Mayores (MLB), que es la manera de hablar en EE.UU. de esta práctica que compite a bateos, se han significado como las pioneras y más originales al imponer un código de vestuario a los periodistas que cubren la información de este deporte.
A partir de la próxima temporada no se permitirá la exhibición de ropa interior, ni prendas transparentes o con desgarros, ni el uso de camisetas sin mangas, o mostrar uno o los dos hombros, ni esa zona que queda entre el pecho y la cintura, ni lucir faldas, vestidos o pantalones cortos que queden, como mucho, a diez centímetros por encima de las rodillas.
Ni las flip flops o chancletas, que hacen que los informadores vayan con los pies descalzos y quién sabe que infecciones pueden transmitir a los atletas.
"No esperamos que los reporteros vistan traje y corbata, pero con el advenimiento de diferentes medios (en alusión a webs y blogueros), ahora hay muchos que no forman parte de grandes organizaciones y, por lo tanto, se han de fijar unas reglas de vestimenta", declaró Phyllis Merhige, vicepresidente de la MLB.
Según su visión, los representantes de los medios han de vestir de "forma apropiada y profesional, con ropa casual en un medio ambiente de trabajo que va del campo de juego al vestuario. Ha llegado el momento –añadió– de organizarnos un poco, de poner las cosas en su sitio antes de que pase algo".
Pero, precisó el portavoz de la asociación, Pat Courtney, "esta no es la respuesta a ningún incidente en concreto".
Sin embargo, nadie duda en apuntar al escándalo que se organizó el 2010, en la liga de fútbol americano. Inés Sáinz, reportera de Azteca TV, entró al vestuario de los Jets de Nueva York a fin de entrevistar al quaterback Mark Sánchez, de origen mexicano. Varios de sus compañeros se metieron con ella, por su aspecto.
Otra telerreportera, Erin Andrews, vivió una situación similar por lo que se calificó de "escasa indumentaria" al hacer la cobertura de los Marlins, equipo de béisbol de Miami. Su presencia también causó sofoco.
Otra prenda censurada son las camisetas que marcan musculatura. "Así, al ver la prohibición de esta pieza, llegue al convencimiento de que este código sólo tiene que ver con el vestuario de las mujeres periodistas", escribe James McManus.
"Aquí se manifiesta la preocupación de que los jugadores –hombres– actúen de manera irresponsable", sostiene el rabino Joshua Hess en The Huffington Post. "¿Es equitativo –se pregunta– penalizar a mujeres reporteras por qué hombres crecidos no puedan controlarse a ellos mismos?, ¿no sería más apropiado educar a esos hombres?".
La denuncia de discriminación la niega la cronista Susan Slusser, una de las integrantes del comité que ha diseñado esta normativa. "Pienso que se iba demasiado casual", remarcó.
"(...) los niñatos, qué pesados, no dejan de contemplarte, me rebelo y tengo que pelearme y los toros no los veo, así que tú ya lo sabes, no te pongas la minifalda...".
Por cierto, el código no explica nada sobre cómo y quién medirá la minifalda del béisbol. A ojo.
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La verdad se habla mucho de los estados islamicos, pero los USA casi estan a su altura en cuando al puritanismo más demagogo. Cada dia leo veo más noticias que indican que hay un cambio de ciclo... volvemos a la EDAD MEDIA, perdemos democracia y nos dicen que es es por le bien de todos (economia, disciplina, control presupostario). Esta claro que solo perjudican a la clase media, que pronto volveremos a ser clase baja, como nuestros abuelos. Lo dicho, al estadio deberemos ir todos con traje, corbata y bien peinaitos... des esta manera estaremos todos bien controlados, como los rebaños